“debería darse mas prioridad a los peatones y a los ciclistas por sobre los automóviles…., los espacios públicos bien desarrollados ayudan a reducir el crimen y promover la calidad de vida de las personas”Enrique Peñalosa, ex Alcalde de Bogotá(Revista diseño+ arquitectura Nº5, 2008)
Hablar de la ciudad debería ser un ejercicio bastante fácil, toda mi vida he vivido en Santiago, pero a la vez me resulta demasiado complejo debido a que lo he recorrido casi por completo.
Santiago no es el cuadrante que delimito Valdivia al fundarla, ni tampoco edificios grandes como podemos admirar por la larga alameda que va cambiando de nombre en la medida que pasamos de una comuna a otra.
La ciudad que conozco esta formada por una gran variedad de subculturas y creencias en donde se confunden los juicios valóricos según las llamadas clases sociales repartidas en las distintas comunas.
Debe ser por esto que me gusta recorrer de un extremo a otro de la ciudad y compartir con los habitantes de estos submundos que se generan en la periferia. Me refiero a no tengo problemas en tomar una cerveza en una escalera con amigos de infancia los cuales hace mucho dejaron de ser un “aporte a la sociedad”, o compartir ideas en la mesa con la familia y a la vez asistir a clases con personas de realidades tan distintas que a veces pareciera que salieron de alguna telenovela juvenil de moda.
Me siento un afortunado al poder compartir tantas cosas y con tantas personas. De hecho la ciudad me ha permitido tener un sentido de la orientación aplicable a lo largo de todo chile, por lo que me es difícil perderme, (de gran ayuda fue aprender a realizar transbordos en las líneas del metro a temprana edad).
A pesar de todo el encanto que veo, esta lejano a ser una ciudad acogedora para sus habitantes, las plazas van desapareciendo debido a que son antro de jóvenes que solo se dedican a drogarse y embriagarse, generando violencia entre grupos. Se necesitan mas calles y agrandar las avenidas para que puedan circular los vehículos, a pesar de lo dañino que es el exceso de gases de los combustibles. Las viviendas cada vez son mas pequeñas y con menos privacidad, sin importar el costo de estas.
En el articulo, Don Enrique Peñalosa asegura que “una buena ciudad es aquella en donde la gente disfruta estar fuera de casa”. Esto cada día se pierde en muchos sectores en donde una autopista pasa afuera de sus casas, o en donde los niños no tienen un espacio para jugar debido a que los puedan atropellar, la gente ya no puede salir a caminar de noche por la inseguridad de sus calles, o por ultimo la televisión tiene algo mas entretenido que ofrecer.
Esta ciudad me encanta, pero se debe a que no tengo hijos con quien compartir y disfrutar, me levanto tarde cuando estoy cansado y me acuesto en la madrugada escuchando música o viendo alguna película, me embriago mas de 1 vez al mes (eso es mas que lo que recomiendan los especialistas), me baño cuando me da la gana y llego tarde tanto a la U como al trabajo.
Creo que por ahora tampoco soy un “aporte a la sociedad” como debería ser según la idiosincrasia nacional, por eso me debe gustar esta ciudad.
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